Seleccionado por su genética en Alemania, este ramirezi combina la belleza eléctrica del azul con una salud y estabilidad excelentes. Su cuerpo brilla bajo la luz del acuario, y su comportamiento es curioso, inteligente y algo territorial. Es perfecto para quienes quieren dar un salto de nivel en su acuario sin complicaciones excesivas.

